viernes, 31 de octubre de 2014

Economía solidaria: lo imposible que sólo tarda un poco más


Estands de la feria celebrada en las instalaciones de la antigua fábrica Fabra i Coats de Barcelona. FOTO: EVA SANLEANDRO 
 Estands de la feria celebrada en las instalaciones de la antigua fábrica Fabra i Coats de Barcelona. FOTO: EVA SANLEANDRO



El fin de semana pasado se celebró en Barcelona la tercera Fira de Economia solidària de Catalunya. Fue la demostración de que lo que parece imposible solo necesita tiempo. Crear otro tipo de economía, social y a su vez con empresas eficientes en todos los sentidos, es posible, factible y esperable. Hubo 190 estands, 17.000 visitantes y 100 conferencias de lo más variadas. Empresas y entidades de todos los sectores, desde la energía hasta la telefonía. Desde la comida hasta la lectura, los medios de comunicación como  Alternativas Económicas o el turismo. Todo entra. La gente está buscando otro modelo económico. Está buscando y construyendo, sin prisa pero sin pausa, alternativas.
Los que hemos estado rondando este mundillo desde hace tiempo sabemos que hace tan solo diez años esto era pura utopía. El simple concepto “economía solidaria” era cosa, para muchos, de un reducto de personas raras salidas de una peli hippie. Chino básico para muchísima gente. (Para quienes todavía lo es, se trata de una economía cuyas empresas, sin ánimo de lucro pero con ánimo de pagar con dignidad los salarios, se rigen bajo los principios de solidaridad, cuidado del entorno, participación, democracia e igualdad).
En estos años los pasos han sido gigantes. Antes era imposible pensar en reunir realmente a tanta gente. Hoy no solo es posible. La feria que comenzó en Barcelona hace tres años ha crecido. Este año se volvió “ Mes de la economía solidaria”, con otras tantísimas actividades y stands también en el Festival Esperanzah, en la Fira Ecoviure, en charlas, debates, marchas... Madrid ya tuvo también dos enormes ferias de economía solidaria, cuyos pasillos eran difíciles de transitar por la cantidad de público. Zaragoza ya tiene su feria. Bilbao está preparando la suya. En noviembre nos espera la Feria de Economía Feminista, con lazos directos con la economía solidaria… el Primer Congreso Internacional de Economía Social y Solidaria… las actividades siguen y siguen…
Desde hace al menos 35 años que España no vivía un boom tan grande de economía solidaria como ahora. Entonces, cuando los obreros tomaban las empresas en quiebra como en la Argentina del 2001, y hacían reflotar sus empleos, gracias al trabajo en equipo y a los lazos de apoyo, nació el germen de las finanzas éticas, de las federaciones de cooperativas, de lo que hoy puede llamarse economía social.
A pesar de todo, parece que las crisis sirven para algo… al menos para despertar sueños, reflexiones y luchas. Ojalá los lazos de solidaridad que hoy se afianzan sean lo suficientemente fuertes para consolidar una economía solidaria al completo, que ocupe los escaños, que llegue a los gobiernos y parta de ellos, que ponga límite al juego de la bolsa y al casino de las finanzas. Una economía que ponga a la persona por delante del capital, y no al revés. Trabajamos en ello. Parece una locura, una utopía. Sí. Pero quién sabe, solo tarde un poco más.

Cada niño, cada niña

Por: | 31 de octubre de 2014

 
Alastair Magnaldo 3
No pocas veces nos sentimos desconcertados por la singularidad de cada quien, insustituible, irremplazable, irrepetible, única. Incluso nos resulta enigmática y algo misteriosa. El que, en cierto modo, la nuestra lo sea también para nosotros mismos no nos alivia la impresión. Cuando se trata de un niño, de una niña, y muy especialmente cuando le apreciamos, le queremos, no cesamos de sorprendernos por lo que no se deja retener en la más precisa de las previsiones.
En algunos casos subrayamos lo parecidos o lo distintos que son, lo que no hace sino confirmar que efectivamente son diferentes. Y no se trata de problematizarlo, y menos aún de establecer mecanismos para neutralizar, por la vía de homogeneizar, su identidad.
Tratamos de comprender, de encontrar y de subrayar los rasgos de una mutua pertenencia, lo común de ciertas experiencias, lo compartido de determinados comportamientos. Empleamos diversas clasificaciones, y nos valemos de variados criterios. Y para ello es imprescindible el conocimiento experto, el buen oficio, lo asentado y cuajado de determinadas prácticas y del análisis de sus consecuencias. Sin embargo, pronto constatamos que conviene no dar demasiado por presupuesto, y menos aún limitarnos a la mera aplicación de fórmulas y de recetas, como si se tratara de embridar con ellas la singularidad.
La creatividad no es simplemente la capacidad de producir novedades, sino de irse haciendo, de transformarse, de crecer. No es solo el brillo de la imaginación y de la inteligencia, es el núcleo de toda una forma de vivir. Por cierto, en ocasiones contemplada con inquietud, con prevención. Hasta el extremo, quizá, de ser considerada como un obstáculo, un desvarío de la fantasía, una fuente de distracción para lo que, ya establecido, ha de asumirse.
Precisamente por ello, cada gesto consistente de un niño, de una niña, introduce alguna suerte de confusión en nuestra aparente seguridad. Y habría de conducirnos a maneras de escucharlos, no para limitarnos a ratificarlo, sino para abrirnos a lo que habla en ese ademán, lo que dice y expresa, lo que busca, lo que demanda. De ahí no se deduce la necesidad de un asentimiento, ni de un consentimiento, sino de una hospitalidad. Y requiere una respuesta. No hacerlo sería un modo de contestar, una forma impaciente de desatención.
Alastair Magnaldo 4
Ciertamente, se trata de procurar condiciones para una adecuada incorporación social y comunitaria de esa singularidad. En alguna medida, este proceso es radicalmente educativo. Pero no es cosa de asimilar, de uniformizar, de establecer parámetros en los que enclaustrar, y no solo conocimientos, o comportamientos, sino formas de vida, hasta el extremo de etiquetarlas, como vía previa, eso sí, para neutralizarlas.
No es cuestión de ignorar hasta qué punto las oportunidades y las condiciones de posibilidad han de constituir el sustento de esos procesos de incorporación social. A partir de ellos, se trata de promover caminos para una atención singularizada, personalizada de cada niño, de cada niña. Que no siempre sepamos cómo, que no siempre podamos, que no siempre encontremos el entorno y la viabilidad para hacerlo no impide reconocer hasta qué punto, de lo contrario, los caminos son tortuosos y los resultados, siempre impredecibles, serán incluso inquietantes. Y con efectos bien definidos y nada aconsejables.
Tal vez, desbordados por una situación que cuanto menos podría calificarse de proliferación de singularidades, pronto nos sentimos conminados a pretender no vernos excesivamente concernidos por ellas. Parecería como si fuera un asunto simplemente suyo y que habría de resolverse por la vía de la adaptación. En caso contrario, pronto engrosaría la cohorte, primero de problemas, para pasar a continuación al estamento de niños problemáticos.
No cabe ignorar que efectivamente hay quienes precisan de especial atención, sus necesidades específicas requieren, para empezar, una detección precoz y la adopción de medidas concretas, que buenos especialistas nos proponen. Y ello, incluso en contextos de carencias, ha de ser una absoluta prioridad. Eso no impide reconocer hasta qué punto pueden llegar a faltar medios y recursos para lograrlo. Y, al respecto, cada niño, cada niña, lo merecen todo.
Alastair Magnaldo 7
En cierta medida, hacerlo viene a ser un espejo de nuestra consideración mutua. Una sociedad muestra su verdadero rostro de múltiples maneras. Una bien concreta es el modo en que afronta la infancia, su prioridad absoluta y fundamental, su carácter primordial y sus derechos. Ignorar el sentido de la singularidad contamina a toda la sociedad en procesos de asimilación y de normalización.
Por ello hemos de ser especialmente cuidadosos a la hora de atender las necesidades especiales y específicas. Más aún en situaciones de agrupación, principalmente si se trata de conjuntos numerosos. Pronto podríamos precipitarnos a identificar, clasificar y endosar comportamientos.
Baste citar, como ejemplo significativo, la percepción no menor, por parte de profesores y orientadores de centros, del diagnóstico de determinados trastornos de alumnos, tales como el denominado déficit de atención e hiperactividad. Este trastorno del comportamiento infantil, de base genética, que provoca alteraciones de la atención, impulsividad y sobreactividad motora, es decir, un problema genérico de falta de autocontrol con amplias repercusiones, merece especial consideración. Es efectivamente un trastorno médico, neurobiológico, que se trata asimismo con fármacos. Pero resultaría inquietante si se convirtiera en un cajón de sastre para cuantos no prestan la llamada debida atención. Y más aún si en ese diagnóstico se incluyeran cuantos molestan, son inquietos, tienen otras atenciones y aquellos que se hallan en entornos poco habitables y encuentran especiales dificultades para adaptarse a la disciplina escolar.
Hay otras causas de semejante falta de concentración, no siempre suficientemente analizadas, estudiantes de familias con situaciones difíciles económica y socialmente que en ocasiones se sienten desbordadas, y no solo con sus hijos, también con su casa y con su vida. Las alteraciones de la atención, impulsividad y sobreactividad motora, tendrían entonces una raíz múltiple y en ocasiones una razón y un tratamiento no siempre ni solo médicos.
De producirse el sobrediagnóstico de identificar como tal trastorno la dificultad de mantener la atención voluntaria frente a actividades, académicas y cotidianas, junto a la falta de control de impulsos, acabaría por hacer de la distracción un síntoma decisivo y suficiente del mismo.
No puede desconocerse que, de hecho, hay quienes precisan ese tratamiento. Pero resultaría sintomático que buscáramos atribuir a dicho trastorno cuanto tenga que ver con la carencia de alicientes o de motivación, con la falta de atención o con la necesidad de otros modos de actividad. El apoyo profesional es al respecto decisivo, pero la singularidad personal, hasta la singularidad social de cada niño, de cada niña, habrían de considerarse antes de asimilarlos, uniformizarlos y homogenizarlos, incluso en un diagnóstico y en una terapia.
Alastair Magnaldo 6
(Imágenes: fotografías de Alastair Magnaldo)

Todos los santos


Hay formas diversas de ver estas fiestas de la calabaza y los difuntos.
Por ejemplo la de Tomás L. de Victoria. Una maravilla con 5 siglos de solera



Tuvo que ser en Alemania, entre los muros blancos de una iglesia del siglo XIII, la Martin Kirche de Freibug, donde descubrí en vivo esta maravilla polifónica, una tarde de Viernes Santo, con la ciudad vacía y llena de primavera a medias entre flores que llegan y nieve que aún resiste en la umbría. Un cielo limpio barrido por el viento y reconfortado por la alternancia de la calma. Y las voces estallaron a la luz de las velas y la desnudez de los arcos apuntados: Dos españoles, Victoria y yo, con siglos de distancia, habíamos cruzado el mapa de Europa, de sur a norte, para darnos un abrazo entrañable.

Angelo Badalamenti - Soundtrack from Twin Peaks [FULL ALBUM]

jueves, 30 de octubre de 2014

La PAH informa


Video de la PAH irrumpiendo hoy en el BMP (Salón Inmobiliario de Barcelona) al grito de “¡TECHO, AGUA Y LUZ!” y “¡SÍ SE PUEDE!”
https://www.youtube.com/watch?v=0A7jf-FWqi4


Afectados Por la Hipoteca ha añadido una foto nueva.


Cuando el dolor es compartido, la solidaridad crece. Cuando el dolor se erradica con la justicia, la solidaridad triunfa y construye ciudadanía empoderada. 
Me pregunto ¿por qué aún no me he encontrado a un político acompañando sin fanfarrias  a los desahuciados? Si no saben de qué va la cosa, si no les duele lo que nos duele a los ciudadanos ¿cómo van  a interesarse de verdad por arreglarlo? Todos somos afectados por el timo de la hipoteca. Sus excesos, su gestión de burbujas como fórmula de su  "España va bien", sus tarjetas black, sus corrupciones y enjuagues han arruinado los bancos, los créditos y la creación de empleo. Han encarecido los artículos de primera necesidad y la energía que consumimos como luz, agua y gas. Mientras sus prima capita se colocan presidendo sus consejos de administración, sin relacionar ni por asomo sus sueldazos con los precios que nos cobran las empresas que ellos "asesoran" y gestionan sin dar golpe, porque no tienen ni idea de gestionar empresas, sólo de medrar en los asuntos públicos y comerciar con sus agendas y teléfonos. Mientras la pobreza infantil y el hambre en la escuela se juntan con el hambre en casa y tirar de limosna, que sustituye a los derechos y a la justicia social. No callaremos hasta que esta panda de inútiles y desvergonzados cambie o se marche para no volver jamás a gestionar ni un kiosco de chuches.

Por eso, todos y todas, menos la casta, somos la PAH.

Bach: The musical offering, BWV 1079 | Jordi Savall

Conciencia se llama esto


Jordi Savall renuncia al Premio Nacional de Música

El músico rechaza el galardón en desacuerdo con la política cultural del Gobierno español


El músico Jordi Savall.

El músico, director y compositor Jordi Savall (Igualada, Barcelona 1941), ha rechazado el Premio Nacional de Música, en la modalidad de interpretación, concedido por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte dotado con 30.000 euros. Los motivos del músico responden a sus discrepancias con la política cultural del ministerio, dirigido por José Ignacio Wert.
Savall, que hace sólo dos semanas fue distinguido con la Medalla de Oro del Parlamento de Cataluña, lo ha comunicado esta mañana al secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle, y después ha hecho pública su decisión en una carta abierta. En la misiva explica que ha agradecido el premio pero que no podía aceptarlo para "no traicionar sus principios y sus convicciones más íntimas", puesto que la distinción procede de la principal institución del Estado responsable del "dramático desinterés y de la grave incompetencia en la defensa y la promoción del arte y de sus creadores".
También ha considerado "insuficientes" los esfuerzos y las inversiones que el Gobierno destina al mundo de las artes y la cultura en general y, en particular, por mantener en el olvido una parte esencial de la cultura: el patrimonio musical hispánico milenario. El Ministerio de Educación, Cultura y Deporte ha emitido un comunicado en el cual expresa su "respeto a la decisión.
En 2012, el escritor Javier Marías renunció al Premio Nacional de Narrativa, por su novela Los enamoramientos. Aceptar el premio, dijo entonces Marías, habría sido una "sinvergonzonería". Marías venía asegurando desde hacía años que no quería premios oficiales. El escritor sostuvo que la razón principal es su voluntad de no querer ser etiquetado como autor "favorecido por este o aquel Gobierno" ni ser involucrado en juegos políticos, por lo que defiende que se habría negado a aceptar el galardón, prescindiendo del partido que estuviera en el poder.

El Cremona no es tanca.El Cremona no se cierra



MAESTROS Y PADRES CUESTIONAN LAS CLASES DE 45 MINUTOS QUE IMPONE LA LOMCE
Los directores alertan que el rendimiento bajará al no llegar a media hora el tiempo efectivo de docencia
http://www.levante-emv.com/comunitat-valenciana/2014/10/30/maestros-padres-cuestionan-clases-45/1181334.html


Los directores alertan que el rendimiento bajará al no llegar a media hora el tiempo efectivo de docencia
levante-emv.com|De Levante-EMV

ELOGIO A LA NORMALIDAD


                                                   
                                     



Hay que ver a lo que hemos llegado. Es grande ser normales. Es fantástica esa naturalidad de las cosas sin más. No andar muertos de miedo ni viendo enemigos por todas partes. Ni mirando bajo el sofá a ver si hay un gremlim a sueldo de los contrincantes. Ni buscándole las cosquillas al sursumcorda. Qué sano es ser normales, XD! Qué reconfortante es ver la realidad como está y no como queremos o no queremos que esté.
Por muy mala que sea, la verdad es mucho más interesante que la mejor y más glamourosa de las trolas y elucubraciones alienantes.
Mamá, yo no quiero ser artista, ni "especial" ni maravillosa, ni legendaria. Sólo quiero ser normal...Suponiendo que ser normal implica sencillez y coherencia entre lo que una es y lo que una muestra. Entre lo que una piensa, siente y hace. Igual que la paloma gris perla que ayer tarde se me plantó en la terraza. En la barandilla. Y sin asustarse ni echar a volar se sentó sobre sus patas rojas mientras yo alucinada por su serenidad, le cantaba guitarra en ristre canciones de mi juventud. Y habaneras del año de la polka. Voló hasta el alféizar de la ventana e incluso me hizo caso cuando le pedí por favor que no picotease las hojas tiernas de la maceta...pero con mucha dignidad se largó cuando intenté ponerle migas de pan para compensar su renuncia a la tentación picoteadora. Esa paloma era honesta. Incorruptible. No quiso que la sobornase agradecida por hacer de monopúblico en mi recital , que sólo era un homenaje a su expresión de vida y de unidad natural entre los seres de cualquier especie. Cuánta magia hay en la normalidad de lo cotidiano... 


                                     



                                       

¿Quién derribó el vuelo de Malaysia Airlines en Ucrania?

30 oct 2014

Vicenç Navarro
 


Catedrático de Políticas Públicas. Universidad Pompeu Fabra, y Profesor de Public Policy. The Johns Hopkins University
Edward S. Herman es uno de los analistas que, como Noam Chomsky, más ha contribuido a desmontar el aparato mediático e ideológico que ha sostenido las bases para que se reprodujera la Guerra Fría en EEUU, la cual benefició, y continúa beneficiando, al complejo industrial-militar estadounidense, que tenía y continúa teniendo un gran poder e influencia sobre el Estado federal estadounidense. Fue nada menos que un General, el General Eisenhower, el que había alertado a la población de EEUU del excesivo poder de tal complejo en la vida política de aquel país. Tras salir elegido como Presidente de EEUU, el General Eisenhower en su discurso de despedida de la Casa Blanca subrayó que tal poder era incompatible con el mantenimiento de la democracia estadounidense. Noam Chomsky y Edward Herman han documentado extensamente la veracidad de tal supuesto. El último, Herman, siguiendo esta línea de exposición, acaba de escribir un artículo, “Plane Shootdowns in the Propaganda System”, que cuestiona la versión promovida por los que están reavivando ahora la Guerra Fría a raíz del derribo de un avión comercial en Ucrania. Una vez más, los mayores medios de información (que son principalmente medios de persuasión) han estado manipulando la información sobre este trágico suceso. Como en muchas ocasiones anteriores, tales como el derribo de un avión de Korean Airilines el 31 de agosto de 1983 por parte de un misil soviético, se demostró más tarde que la versión oficial promovida por el gobierno federal de EEUU y los mayores medios de información, incluyendo The New York Times, era errónea  -y ello a pesar de que sabían que tal versión no era cierta- en su intento de implicar a la Unión Soviética en un acto de enorme crueldad, matando a los viajeros de un avión comercial. Tuvieron que pasar cinco años para que The New York Times admitiera que no había informado correctamente, sin haberse tomado la molestia de investigar varios casos de aviones comerciales derribados anteriormente, que mostraban la falta de credibilidad en las noticias propagadas en los conflictos y tensiones en los que participa el gobierno federal de EEUU. Herman analiza caso por caso: vuelo 007 de Korean Airlines, 31 de agosto de 1983; vuelo 103 de Pan Am, diciembre de 1988, en Escocia; vuelo 655 de Iran Air, destruido, por cierto, por un misil estadounidense, julio de 1988; vuelo 114 de Libyan Airlines, febrero de 1971; y ahora, Malaysia Airlines, vuelo 17, julio de 2014.
La versión oficial de lo ocurrido
La versión oficial de este último caso, proveída por el gobierno federal de EEUU y por la mayoría de los medios, es que los rebeldes, llamados pro rusos, supuestamente títeres del Presidente Putin, fueron los que, con toda maldad y crueldad, derribaron el avión con un misil ruso, proveído por Putin, al cual se le presenta como el nuevo Hitler. (Para ver la demonización de Putin por los medios, ver mi artículo “Los mitos sobre Ucrania”, Público, 18.09.14). A la luz de los hechos, Edward S. Herman cuestiona que ello fuera tan claro. Hasta ahora, señala él, no se ha presentado ninguna evidencia de que fueran los llamados pro rusos los que dispararan el misil. Y lo que sí se conoce es que de títeres tienen poco. Son fuerzas autónomas, con una gran capacidad de movilización, pues la mayoría de la población los apoya, y, como es fácil de ver, tampoco son apéndices de Putin, pues en las imágenes televisivas se ve que muchas de sus banderas tienen la hoz y el martillo, símbolos del comunismo, que el Sr. Putin y su gobierno no han hecho suyos desde hace tiempo. En realidad, el gobierno Putin tiene unas relaciones tensas y difíciles con el Partido Comunista Ruso, que es el mayor partido de la oposición hoy en Rusia. Ahora bien, estas fuerzas son populares, no solo en el Este de Ucrania, sino también en Rusia.
Pero el punto de discusión no es si Putin es un santo o un diablo, o si las tropas rebeldes que se oponen al gobierno de Kiev son o no títeres de Putin. Los datos muestran que Putin, siendo un oligarca con escasas sensibilidades democráticas, no es, sin embargo, el demonio irracional como se le presenta. Y los mismos datos muestran que los rebeldes tienen su propia autonomía y no van al mismo paso que Putin. Y, como bien señala Herman, hoy, el único gobierno que ha proveído toda la información al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, ha sido, precisamente, el gobierno ruso. La evidencia es que dicho vuelo se desvió de su recorrido normal, y que iba seguido peligrosamente de cerca (a unos 3 ó 5 kilómetros) por un avión militar del ejército ucraniano. Es clave que se explique qué hacía ese avión allí, de dónde vino el misil, y quién lo disparó. Estas son preguntas que no se han contestado. El gobierno ruso ha pedido una investigación internacional que ni el gobierno de Kiev ni el de EEUU han aceptado. ¿Por qué no?
Los silenciados datos y el sesgo de los medios
En una entrevista de Edward Herman por parte de Dan Falcone, publicada en Truthout, 10.10.14, (“Mainstream News Coverage of Ukraine Malaysia Airlines Flight 17 Shows Western Propaganda Machine at Work”, Herman expande en la manipulación que existe en los reportajes de los mayores medios de información occidental en su cobertura de la situación en Ucrania. Señala la ocultación de la gran influencia que personalidades neonazis tienen en el gobierno ucraniano y en las tropas que combaten en las regiones pro rusas del mismo país. Muestra como, por el contrario, a los rebeldes se les llama separatistas y pro-Putin, sin aclarar que son predominantemente federalistas y no actúan como meros instrumentos del gobierno ruso. Tales medios también ignoran o tocan de pasada y de puntillas el rol del gobierno estadounidense en el golpe de febrero de 2014, y el papel de apoyo a tal golpe por parte del Fondo Monetario Internacional FMI y la Comisión Europea. También denuncia Herman el silencio del bombardeo discriminado del ejército ucraniano a las poblaciones civiles en las regiones controladas por los federalistas de cultura rusa. Es una entrevista –la que se le hace a Herman- que debería leerse en su totalidad. Se la aconsejo.


Un pensamiento no urgente

30 oct 2014


por Luis García Montero



                                        


La batalla electoral que se avecina va a fundarse en la dinámica del miedo y la indignación. Jugarán con el miedo los interesados en que todo siga igual o casi igual. Animarán a la indignación los que sueñan con superar el régimen de bipartidismo que ha gobernado en los últimos años.
Los defensores del cambio tienen como exigencia prioritaria evitar en lo posible que la indignación no sirva para alimentar el miedo. Como vivimos dentro de una situación de urgencia, es indispensable la capacidad de sostener un pensamiento no urgente. La política no tiene más remedio que contar con la prisa como una coyuntura obligada por las demandas de la actualidad. Pero debe también vigilar los efectos negativos del apresuramiento e intentar superarlos con una reflexión a medio y largo plazo. Sin esta reflexión, las mejores virtudes llegan a convertirse en renuncias y en peligros.
El espectáculo de la realidad española ha colmado ya muchos vasos, casi todos los vasos. Las gotas de la tormenta se han acumulado en estos años y superan cualquier capacidad de resistencia. La indignación está ahí, es el pan cotidiano de nuestra sociedad. Los bombardeos de la corrupción, la precariedad y la mentira han impuesto el ruidoso vértigo en el que la política sufre un doble maltrato. A la política la han dañado, desde luego, los corruptos que se sirvieron de ella para favorecer patrimonios personales. Ahora la daña también un descrédito generalizado que confunde cualquier deseo de intervención pública con el robo, la hipocresía y la sospecha.
Conviene que aquellas sociedades dispuestas a buscar alternativas no caigan en el apoliticismo o en la crítica fácil contra la política. La furia es un estado que sólo conduce a la desilusión o al colapso. El pensamiento urgente sobre el mal uso institucional de la política por los partidos gobernantes corre el peligro de manchar cualquier alternativa. De esta forma se pueden liquidar los sistemas de participación y vigilancia cívica en los ámbitos del poder.
Hemos tenido ejemplos claros. El escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid y Bankia ha animado las denuncias contra la participación de representantes políticos y sindicales en los órganos directivos hasta el punto de que se toman ya decisiones tajantes de abandono y culpa. Pero un mal uso de la presencia política no debería desembocar en una pérdida de memoria de los beneficios sociales de las antiguas Cajas de Ahorro y, desde luego, no tendría que cancelar la aspiración a una banca pública. La independencia del mundo de los negocios, corruptor último de la política a través de los sobornos y las privatizaciones, no es una solución deseable para nuestros problemas.
Una crítica seria a la corrupción exige debates que vayan más allá del comportamiento poco escrupuloso de algunas personas y de sus partidos. Limitándonos a la denuncia del mal estado de la democracia española, con el abuso desmedido de las burocracias oficiales y de los aparatos en uso, se puede insistir en el desgaste del bipartidismo y animar al voto de castigo. Pero resulta difícil alumbrar una verdadera alternativa, animar al voto creativo. Esta alternativa, además, tiene ahora un doble reto, ya que no basta con castigar al PP. Debe evitar también una posible situación de pacto entre PP y PSOE que cambie el turno bipartidista por una gran coalición. El debate catalán y la falacia de una lucha conjunta de los grandes partidos contra la corrupción pueden empujar hacia ese camino sin salida.
Los métodos de participación democrática son muy importantes. Pero si se pretende crear un horizonte y conseguir algo más que un sube y baja electoral, parece necesario salirse de la urgencia y convocar a una meditación colectiva sobre la economía europea y sobre la cuestión social en España. Aunque parezca paradójico, la politización de la sociedad es necesaria para vencer los miedos característicos del descrédito político. También hará falta la politización para resistir de forma sólida las amenazas sobre nuestro futuro que ya esgrimen los mismos que han envenenado nuestro presente.
Una nueva mayoría cívica, muy integradora de sensibilidades, historias e ilusiones, puede combatir el lema terrible que nos tienen preparado: “¡Nosotros somos malos, pero ustedes van a pasarlo peor si nos echan!”.

La voz de Iñaki


foto de la noticia

Urticaria

EL PAÍS   


::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Es cierto, Iñaki. Los poderes corruptos tienen el empeño de legalizar lo moralmente  ilícito, tanto como lo  político y socialmente ilegítimo. De eso se nutren sus miserias y sus mejunjes. De ahí nacen los "éxitos" de su basurero habitual. Y el hedor insoportable que emiten. Un hedor que contamina todo, que enturbia la visión y  la percepción, que intoxica, que atufa, que asfixia la conciencia y mata el alma, deforma la mente,  atrofia la sensibilidad interna y externa, que diría Kant, y  que, para más inri, contagia aún antes de llegar a la meta del triunfo; para "triunfar" en esos niveles hay que corromperse previamente o no hay tu tía. Es que si no es así, no se accede a la entrada siquiera. Imaginemos que para ganar el GP de motociclismo, los pilotos tuviesen que atravesar inmensas extensiones de residuos y basuras, cieno maloliente, aguas fecales, de porquería en todos los registros. Y que el ganador fuese el que mejor se manejase en la gestión del pudridero. Al que menos le afectase. El que se hiciese el amo del cotarro. Pues eso. En ello están los próceres al uso. Y los aspirantes, también. 
Por ejemplo, no se dialoga dentro del mismo partido con los sectores críticos que pretenden mejorar las cosas, al contrario, se le silencia cuanto antes, son incómodos, apelan a la conciencia y a la fidelidad a los principios sanos que  hicieron nacer la causa; a esos Pepitosgrillo, se les coloca una morzada, se les ningunea o se les ridiculiza, se les aparta o se les califica de trolls y ya está resuelto el caso. Pero, en cambio, sí se dialoga encantados con los poderes que quieren cargarse de verdad el proyecto. O con los poderes que sobre todo dan una pasta. 
Aznar, como Berlusconi, eran uña y carne con Gadafi, cuando Gadafi era un filón inversor en los bancos de este Occidente tan comprensivo, relajado y moralmente distraído.  Luego ya se sabe la historia. Sic transit gloria mundi. Gadafi acabó como acabó y el Berlusca y su miniyó ibérico, a lo suyo.
 Todavía la humanidad no ha sido capaz de superar la contraética del Príncipe maquiavélico y la reproduce, admirando su pericia, en vez de llevarla al juzgado de guardia, la aplaude y le vota. Sigue en la brecha e incluso se diría que haciéndola aún más honda e insuperable. La brecha moral. El abismo tenebroso de los medios peores convertidos en fin. En método y en lucro. En modus vivendi. Aunque para el resto de género humano sin implicaciones obscenas, se convierta en  modus moriendi. ¿Qué importan esas cuestiones insignificantes, si se cumplen los objetivos propuestos, verdad? Parafraseando a los Luthiers, "¿qué importa perder una corona si el resto de la dentadura va funcionando?"

El neoliberalismo se perdió para la ética hace tantos años que ya no queda ni el recuerdo de cuando aún respiraba socialdemocracia incipiente y bien intencionada, conciencia social y rasgos elementales de humanidad. De la mano del detritus  moral todo es posible y el que no medra es porque no quiere. O porque es tonto de remate. O es un perdedor en un mundo donde hay que ganarlo todo hasta agotarse y sin saber siquiera el significado auténtico de la ganancia. "Mierda mi general", como termina el Patriarca sumergido en su otoño putrefacto, en la enorme metáfora del poder que hace García Márquez. O también, como pie de foto bajo el rictus de Rajoy o de Aguirre o de Montoro o de Aznar..."mierda social, política, económica, ética y estética, señorías. A toneladas" 




EXCLUSIVA
LAS ROZAS (MADRID), 22/11/08.- La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre (i), el presidente de las Nuevas Generaciones del Partido Popular, Pablo Casado (c), y el ex presidente del gobierno José María Aznar saludan esta tarde en el Congreso de las Nuevas Generaciones del PP, celebrado en la localidad madrileña de Las Rozas.EFE/Juan Carlos Hidalgo
Esperanza Aguirre, junto a Pablo Casado y José María Aznar

Aznar utilizó recursos públicos para sus negocios privados en la Libia de Gadafi

El diputado por Ávila Pablo Casado, entonces funcionario como vocal asesor de la oficina del expresidente del Gobierno, fue la persona indicada por Aznar en el contrato con Abengoa para estar en copia de "cualquier comunicación entre las Partes derivada del presente Acuerdo". (eldiario.es)

martes, 28 de octubre de 2014

Plácido Domingo se une al Coro Estable del Teatro Colón, para cantar "Va...

    


Perfecta lección de democracia. El Maestro, el genio de la voz, se suma al anonimato como una voz más. El coro se enriquece y disfruta, el público goza el bien común y el Maestro da una lección de modestia y de grandeza. De sabiduría. Sirviendo a la comunidad antes que a su ego brillante, que ha sometido al servicio del espíritu universal. La música resulta así la mejor escuela de ciudadanía. 
A ver si los políticos aprenden de los sabios y cambian de planteamientos. Y como apunta Platón en 'La República', los ciudadanos decidimos  elegir como gobernantes a los sabios y no a los listos.

El cuento de la abuelita


El cuento de la abuelita

Esperanza Aguirre, chiste de Manel Fontdevila
El chiste de Manel Fontdevila es de 2009 pero sigue en plena vigencia.
Érase una pobre abuelita sexagenaria que presidía un partido madrileño incompatible con la corrupción. A pesar de su alegría y su bondad, la abuelita tropezaba una y otra vez con malvados políticos que se aprovechaban de ella y abusaban de su confianza para robar. Bajo las faldas de esta sexagenaria de voz temblorosa, creció un consejero de Deportes llamado Alberto López Viejo, que se llevó 5,5 millones de euros en mordidas de la Gürtel. Y unos consejeros de Sanidad llamados Juan José Güemes y Manuel Lamela, imputados por cohecho y prevaricación. Y un presidente de la patronal como Gerardo Díaz Ferrán, hoy preso en Soto del Real. Y un montón de alcaldes, concejales y diputados autonómicos que hicieron de la Comunidad de Madrid un lodazal que la pobre abuelita se afanaba por limpiar. 
La abuelita se llama Esperanza Aguirre y ayer volvió a tomar el pelo a los ciudadanos con otro cuento increíble de tragar. A la pobre sexagenaria la han vuelto a engañar, una vez más. Ha descubierto, "alucinando en colores", que lo que medio Madrid ya sabía sobre Francisco Granados era verdad: que su fiel lugarteniente era un político corrupto, un chorizo, un ladrón que al parecer se forró cobrando comisiones del 3% aquí y allá. 
"Si hubiera tenido la sospecha más mínima, habría actuado con prontitud", dice ahora Esperanza Aguirre. No puede ser más cínica. Descartado que Aguirre sea estúpida, sólo queda pensar que no se quiso enterar. Francisco Granados es el mismo político  al que le quemaron un coche en su garaje que estaba a nombre de un constructor de su pueblo pero conducía su mujer. En lugar de sospechar, Aguirre llegó a decir que era "un atentado político". 
Granados es también el político que se construía a su medida una enorme mansión del tamaño de un centro de salud y que no parecía tener intención de pagar. Y es también el mismo político siniestro que escogió a varios de los espías de la Gestapillo, esa agencia de mortadelos pagada por la Comunidad de Madrid y que en parte estaba formada por guardias civiles de Valdemoro, el pueblo del que Granados fue alcalde.
El fétido olor de la corrupción hace años que impregnaba todo lo que Granados tocaba. Lo sabíamos varios periodistas, que publicamos muchas de estas historias. Lo sabía la oposición, que le señalaban como gran conseguidor. Lo reconocían en privado otros dirigentes del PP, que contaban que desde Génova le habían llamado la atención. Lo sabía medio Madrid, menos Esperanza Aguirre. Ella no.
Francisco Granados no sólo es el principal beneficiado de  esta nueva trama de corrupción, sino también su presunto promotor. La operación Púnica, como la ha bautizado la Guardia Civil, saca su apelativo del nombre científico del granado: Punica granatum. Correa es a la Gürtel como Granados a la Púnica. Como ambas tramas corruptas, al Partido Popular de Madrid.
Aguirre dice ahora que "no va eludir su responsabilidad". ¿Y cuál es esa responsabilidad? "Pedir disculpas", nada más. La abuelita retirada de la política que aún preside el PP de Madrid dice sentir "una profunda vergüenza", pero no se plantea dimitir. También seguirá trabajando para una empresa de cazatalentos; es evidente su buen ojo a la hora de fichar.
Hay que recordarlo: Esperanza Aguirre llegó a la presidencia de la Comunidad de Madrid gracias al 'tamayazo'; fue el propio Francisco Granados quien presidió la comisión de investigación parlamentaria para "aclarar" ese caso de corrupción. Fue la candidata que pagó gran parte de su campaña electoral a la Gürtel, por medio de "donativos" de empresarios como Díaz Ferrán y Arturo Fernández a Fundescam.
Detrás de cada político corrupto hay dos tertulianos, decía una famosa pancarta del 15M. Pronto veremos a algunos periodistas justificar el buen hacer de Esperanza, su mano dura contra la corrupción, su valentía al dar la cara y hablar a los ciudadanos para pedir perdón. Dentro de unos días, lo mismo Aguirre nos cuente que fue ella quien descubrió la trama Púnica, como antes hizo con la Gürtel. El cuento de la abuelita crecerá, ya lo verán. Y habrá quien se lo quiera tragar.

Una amable charla

Por: | 28 de octubre de 2014
 
Aldo Balding Grande
Hay algo extraordinario en la charla tantas veces intrascendente, al menos en apariencia. No siempre las grandes comunicaciones tienen lugar en el contexto de entronizadas conversaciones, ni en el de los grandes encuentros, ni siquiera ello garantiza los más importantes hallazgos. Si la retórica es, para Meyer, “la negociación de la distancia entre individuos sobre una cuestión concreta”, tal vez todo cuanto nos decimos se ve afectado por la necesidad de dar con la distancia adecuada, lo que condiciona la viabilidad de sintonizar. Y a veces carecemos de la más mínima amabilidad. Olvidamos que es condición de posibilidad de la palabra ajustada, incluso para marcar distancias.
En ocasiones, las más relevantes reuniones se ven afectadas por la incapacidad de sostener una charla distendida, sintomáticamente denominada desenfadada, que genere confianza, y dé humanidad a la relación que ha de mantenerse. Tendemos a estimar que se trata simplemente de liberarse de todo cuidado o consideración, como muestra de proximidad, lo que no necesariamente es señal de algo positivo. Más bien, la cercanía se produce, para empezar, siendo capaz de velar por no dejar de ser quien se es y, en cierta medida, como se es. Y de propiciar que los demás lo sean. Y eso incluye no limitarse a lo que ya somos. De lo contrario, lo que se pone de manifiesto es sencillamente la incompetencia para estar a la altura de lo que requiere la situación. No somos la persona adecuada. Aunque no faltan quienes suelen estimar que eso más bien le ocurre a su interlocutor.
No hay que estar tan seguro de que cuando no hablamos de nada, nada se diga. En cualquier caso, en la cadencia morosa o precipitada de una charla, de una u otra manera, nos expresamos. Todo es gesto elocuente. Por supuesto, también el silencio, y la mirada, y la corporalidad que tanto intervienen. De ahí que quepa decir que hay manifestación, y que hasta en la más contenida charla, se produce cierta exposición. No es tan fácil eludirla, ni siquiera muy recomendable. Y no ya solo porque, de no haberla, no hay propiamente palabra, sino porque difícilmente cabe sustraerse a una mayor transparencia que la que se pretende. Al charlar nos decimos mucho más que lo que contamos.
En cierta medida, cuando hablamos de charlar hacemos lo que decimos. Pero para ello es imprescindible que contemos con alguien, que lo tengamos en consideración. La charla no necesita proponerse demasiado, ni esperar más de lo previsible. En cierto modo, no suele ser muy pretenciosa. Y ahí radica la fuerza de sus imprevisibles efectos, en la pujanza de lo inesperado. Poco a poco, quizá con la parsimonia de lo que no busca ser necesariamente rentable, va impregnándolo todo de un tono no pocas veces amigable.
Aldo Balding  (20)
Sin embargo, cuando advertimos que vamos a charlar, precisamente por esas supuestas expectativas, más bien modestas, nos preparamos para aquello que no siempre controlamos, nos situamos ante lo que podría suceder en el simple departir. Tal vez por eso tendemos a dar la charla a los demás, no sea que en caso de entregarnos al charlar nos veamos llamados a compartir la palabra. O desbordados por el juego de lo impensado.
En tiempo de grandilocuencias, mientras esgrimimos la necesidad de ser directos y claros, más bien buscamos el control de la palabra, tememos sus azarosos efectos. Pero no precisamente para evitar con ello descuidarnos, sino para protegernos de su decir, esto es, de lo que en verdad decimos y se dice. No es tan evidente que pretendamos rehuir el afectar a los demás, ni mantenernos en la discreción de lo contenido, sino que parecería que nos inquieta la llegada silenciosa que toda charla comporta. Y ni siquiera cabe presumir de qué o de quien.
Por eso es tan atractivo, e inquietante, intervenir en contextos aparentemente liberados de cualquier formalismo. Tanto en las relaciones personales como profesionales. No deja de ser necesario, aunque sería absolutamente ingenuo considerar que ello es inocuo e inocente. Todo formato tiene sus formalidades. Y las formas son asimismo contenido.
En todo caso, la mejor precaución es la de no hacer del necesario cuidado el principal argumento para un decir cohibido, o para dejar de ser uno mismo. Algo que resultaría, por cierto, bien controvertido y poco atractivo. Sin embargo, no es cuestión de basarlo todo en la, en muchos casos, malentendida naturalidad, o en la prestigiosa espontaneidad, es algo bastante más radical y que consiste en no estimar que la impostura es una protección. Resulta tan delatora como insoportable. Que sea una charla informal no significa que no se trate de una conversación sincera y auténtica. Y no indefectiblemente fácil. No pocas veces, grandes decisiones se fraguan en el contexto, y en el fragor, de sencillas charlas.
Aldo Balding 2
Resulta importante reivindicar este tipo de encuentros, precisamente cuando más bien se pretende imponer la perorata o la contienda como modo singular y sincero de expresión. Es necesaria y fecunda la controversia, si no nos afincamos en ella. Ahora bien el conflicto con alguien no necesariamente implica que haya de ser contra él. La distancia puede ser insalvable, pero incluso para establecerla se requiere cordialidad, la de la constatación de lo inviable. Hasta los desacuerdos pueden establecerse y no es desaconsejable hacerlo.
La amable charla no supone la falta de firmeza o de posición. Requiere más bien no permanecer anclado en la propia situación, esgrimiéndola una y otra vez, como si ello diera cuenta de algo distinto de nuestra actitud. Entonces es fácil confundir las convicciones con las obsesiones. Y en tal caso, la amabilidad solo alcanza a ser indiferencia o paternal condescendencia, enmascarada de tolerancia, como si eso fuera amabilidad.
Por ello, en cada amable charla destellan aquellos principios y valores que propician formas de encuentro que constituyen una dinámica social distinta. En esta medida, es un gesto que cuestiona otros modos impositivos de hablar, en los que la cháchara parece soltura y elocuencia. Y, precisamente, por la distinta consideración que supone de los demás, por la diversa comprensión que implica respecto de los otros. Cerca, sencillamente, como trascurre el tiempo de vida, las palabras van haciendo, tejiendo y destejiendo. Y los afectos y las razones se trenzan sin necesitar demasiadas distinciones ni explicaciones.
No hay lugares preestablecidos para una charla. Ella procura su propio espacio y abre la duración. En no pocas ocasiones puede ser determinante para que la palabra haga. Su ausencia lo puebla todo de rifirrafes, dimes y diretes, por muy sentenciosos que pretendan presentarse; de advertencias y amenazas, por muy sutiles que busquen mostrarse; de consejas admonitorias, que se ofrecen como solución, si no como salvación. Así, nuestras formas de conversación son una constatación de la concepción que sostiene nuestra existencia individual y colectiva. Pueden llegar a ser trato amable. Y para pensarlo, nos acompaña Séneca. “Así debes hablar, así debes vivir”.
1396118811-015

La voz de Iñaki

lunes, 27 de octubre de 2014

La redada in articulo finis

                                      
                                         


De repente a alguien le ha dado un ataque de nervios y han saltado los sensores del Estado de tolerancia sin límites con el latrocinio institucionalizado en el que vegetamos ex illo tempore. La policía y la guardia civil se han activado y nos están deleitando con un capítulo de Los Hombres de Harrelson. La verdad es que si esto lo hubiesen hecho hace un par años, los ciudadanos nos habríamos sorprendido y aplaudido al nuevo gobierno por su eficiencia y su eficacia, pero es que se les ha pasado el arroz y ya no nos queda ni capacidad para asombrarnos ni para sorprendernos ni para algo más que no sea la desconfianza y el mosqueo hacia esta peña incalificable  y a qué santo montan ahora estos poyos histriónicos si son íntimos amigos del lumpen que ahora persiguen como al cerdo en el hombro del ladrón , en el viejo chiste.

Los ciudadanos ya no creemos ni en los reyes magos ni en los demás reyes habituales. No creemos ni en los partidos ni en sus rifirrafes, es más, creemos que partidos como el que nos gobierna, son capaces de cualquier cosa, hasta de montar un auto sacramental o un entremés renacentista, para entretenernos con el ébola o la detención de los despojos de poca monta, mientras van tejiendo la escapatoria de unas cuentas en "B"  camufladas por el ancho mapa de pparaísos fiscales,  borrando discos duros, encerrando en prisión a sus sicarios y esbirros para que no canten "il va pensiero", porque no tienen la menor intención de declarar y confesar a la Justicia, ni mucho menos entregarse a ella, porque saben que caerían del primero al ultimo. Los ciudadanos ya sospechan hace tiempo que estos numeritos en plan Miami vice son agua de borrajas y que mañana o pasado, las fianzas dejarán salir por la puerta de atrás de los calabozos y juzgados a los chorizos en ristra, que pagarán su libertad con el botín de la charcuteria acumulada y asunto concluido. Así dejan que la ira de los ciudadanos se explaye durante un par de días por los pueblos y ayuntamientos implicados, que los medios y sus tertulias especulen  y que parezca que el pp es inocente como una paloma y no ávido, rapaz y carroñero como una bandada de buitres bulímicos. 

¿Por qué pensamos estas cosas? Pues porque estamos nadando en corrupción la tira de años, porque cada vez que se ha pillado a un chorizo de campanillas con las manos en la masa, se le ha defendido a sangre y fuego y se ha perseguido a los jueces que le han señalado como imputado o convicto. Y es natural que ahora esta mascarada nos huela a chamusquina salvacabezas pperas y a un ridículo sainete decimonónico y anacrónico como los de Arniches. 
Hay que ser de lo más torpe para hacer comparecer a Aguirre acusando a Granados de corrupto. Aguirre, la irresponsable jerifalta incapaz de afrontar una simple infracción de tráfico y pagar una multa por ello, como hace, en tal situación, cualquier persona normal con los circuitos mentales sin chamuscar, en vez salir de estampida como un bisonte histérico arrollando lo que pilla por el camino. Y porque es imposible que un gobierno capaz de mantener a Mato como ministra después de lo del Jaguar y  lo del ébola, sea capaz de afrontar nada menos que una situación como la de hoy y quedarse extrañado por las detenciones, lamentando el infortunio de la coincidencia choricera con su impecable partido político, algo que en cualquier democracia normalita del mundo occidental, habría desencadenado una crisis de gobierno y un rosario de dimisiones desde el Presidente del Gobierno hasta el bedel de Génova.

¿Cómo vamos a creer que eso es cierto y no un apaño lavacaras ante la caída en picado de las encuestas, que el pp sabe como están, mejor que nosotros... Saben que el Psoe le ha pasado en intención de voto y que Podemos también, como segunda fuerza...y les ha dado un patatús de muerte. Esperaban que la Asamblea ciudadana podemista fuese un caos y un desastre desbaratado, pero han descubierto un ejercicio de democracia en vivo y directo al que los españoles no estamos acostumbrados, donde las cosas se hablan sin miedo, se puede opinar todo lo contrario y no pasa nada. Al revés, se sale más convencidos de la propia libertad y de que vale la pena currar como ciudadanos mucho más que como afiliados a nada y que uno vota a quien más le convence y no a quien mejor le engaña. Y el pp se ha destarifado aún más si cabe, con el shock. No lo ha resistido. Y se ha puesto a desahuciar con desesperación al chorizamen de los sillones edilicios con una diligencia inusitada. Por eso nos hemos mosqueado. Porque el pp nunca es diligente si no es para pasar facturas por tres euros con amenaza de embargo o para acusar de "y tú más" a la oposición. O para sacar leyes blindachorizos o aberraciones como la del aborto o como las amnistías fiscales y hacer la vista gorda con todo lo que sea trincar a saco. No vale para otra cosa.


                                     

La dura realidad que el pp no quiere afrontar en público es lo que ya sabe de sobra en privado: que  nadie le cree. Ni nadie se cree que a Aguirre o  a Rajoy a estas alturas les pille de sorpresa la condición púnica y corupta de Granados y sus choris afines, si ya  se le tuvo que exonerar de un cargo importante, como a Blesa. Lo inexplicable es que sabiéndolo todo el mundo, esos tipos estuviesen aún sin dar cuenta de sus fechorías y gozando de lugares preeminentes en el pp sin que se les pidiesen responsabilidades. Como es la tónica general de ese contubernio, por ejemplo en Valencia, donde ninguno de los elementos pillados en lo peor han pasado de renunciar al cargo después de la tira de años con la justicia a los pies de los caballos y haciendo el ridículo, casos como Fabra, Cotino, Blasco, Camps, Barberá, etc...o  incluso en plan  mascarada estrambótica en el caso de Camps, con la justicia y un "jurado popular" invitado por el pp a alojarse en un buen hotel a gastos pagados, mientras deliberaban entre  la culpabilidad y la inocencia del interfecto.

Por todas estas razones, estamos convencidos de que esta comedia cutrísima es un maquillaje empastrado sobre la jeta de lo más corrupto, un tapacosturas sobre el cositrajo de esa confección chapucera que han dado en llamar gobierno, cuando se debería llamar enjuague, robo indecente legalizado y estafa electoral, así, sin eufemismos. Y por llamar a las cosas por su nombre.

Nuestro sufrimiento social nos da derecho a que nuestra única conversación posible con ellos sea un escrache continuo. Y, ahora, si les molesta no ser ni creíbles ni merecedores de respeto por tan cínica y cobarde indecencia, les queda el mismo recurso que Andrea Fabra dedicó a la ciudadanía pisoteada por ellos: 'que se jodan'. Quien la hace la paga a su hora y en su momento. Y no va a quedar en pie ni la sombra de estos malandrines incompetentes y corruptos en la misma proporción. Escoria moral y cognitiva en todo su esplendor. Que los zurzan con hilo azul para no desentonar con el fondo gaviotil.

La PAH informa


El Parlament de Cataluña admite a trámite la ILP de Medidas Urgentes para hacer frente a la Emergencia Habitacional y la Pobreza Energética

El  pasado 10 de julio se presentó en el Parlament de Catalunya la ILP de Medidas Urgentes para hacer frente a la Emergencia Habitacional y la  Pobreza Energética promovida por la PAH, el Observatori DESC i la  Alianza contra la pobreza energética
Ayer,  martes 13 de octubre, la Mesa del Parlament de Cataluña, admitió a  trámite la ILP. Esta ILP, a partir de las competencias del gobierno de  la Generalitat en materia de vivienda y protección de consumidores,  Sigue leyendo…

Los últimos datos del INE confirman el fracaso de las medidas-parche del PP y la vulneración del derecho a la vivienda

Hoy se han publicado los datos del segundo trimestre sobre ejecuciones hipotecarias. Las cifras publicadas por el INE confirman, una vez más, que las medidas tomadas por el PP no hacen más que agravar la situación de emergencia habitacional y de vulneración de derechos humanos en materia de vivienda en España.
Según los datos oficiales, en el 2º trimestre de 2014 se han iniciado 32.960 ejecuciones hipotecarias. Del total de ejecuciones, 19.155 son viviendas, es Sigue leyendo…